Este fin de semana Bryan Bouffier volverá al campeonato de Europa con un Citroen DS3 RRC, después de conseguir su primer podium en el mundial en el pasado Rallye Montecarlo, donde corrió con un Ford Fiesta WRC.
El piloto francés decidió correr el Rallye Montecarlo después de que Hyundai no contase con el, después de ser piloto de pruebas para la marca coreana en 2013. "Fue una gran oportunidad poder formar parte de un proyecto asi. Hyundai empezó a trabajar hace apenas un año. Como piloto de pruebas tenia una gran responsabilidad, porque tenían grandes expectativas para los próximos año", dijo Bouffier. "Trabajar como piloto de pruebas fue una gran expectativa, pero, ante todo, yo soy un piloto de carreras y espero que me den una oportunidad en el futuro. En mi carrera ha habido altibajos. Pero tampoco me puedo quejar, porque durante diez años he estado activo. Pude correr muchos rallyes, tuve buenos programas y gane una gran cantidad de pruebas. El trabajo de probar fue una oportunidad más en mi carrera , pero yo prefiero los rallyes".
Este próximo fin de semana Bouffier correrá una nueva prueba del Campeonato de Europa. Hace tres años que tuvo una buena oportunidad de ganar el título del IRC (Actual europeo). Sin embargo, perdió el titulo por la perdida de unos valiosos puntos.
"Por supuesto que fue una decepción", exclamo Bouffier. " Tuvimos unas bonitas peleas con Juho Hänninen, Jan Kopecky y Andreas Mikkelsen. Todo el mundo tuvo que ir al límite".
En la próxima carrera del Campeonato, en Letonia, Bouffier saldra con un Citroën DS3 RRC. "En cuanto a los R5, por lo que todavía tenemos entendido, habrá que esperar para ver todo el potencial de estos coches. Ahora sólo el Fiesta está homologado y habrá que esperar a que los nuevos modelos lo hagan (208 T16 y DS3 R5). Por lo tanto, es demasiado pronto para una comparación con los Súper 2000", dijo un Bouffier que no sabrá que sera de el al acabar la cita del europeo.
Este próximo fin de semana Bouffier correrá una nueva prueba del Campeonato de Europa. Hace tres años que tuvo una buena oportunidad de ganar el título del IRC (Actual europeo). Sin embargo, perdió el titulo por la perdida de unos valiosos puntos.
"Por supuesto que fue una decepción", exclamo Bouffier. " Tuvimos unas bonitas peleas con Juho Hänninen, Jan Kopecky y Andreas Mikkelsen. Todo el mundo tuvo que ir al límite".
En la próxima carrera del Campeonato, en Letonia, Bouffier saldra con un Citroën DS3 RRC. "En cuanto a los R5, por lo que todavía tenemos entendido, habrá que esperar para ver todo el potencial de estos coches. Ahora sólo el Fiesta está homologado y habrá que esperar a que los nuevos modelos lo hagan (208 T16 y DS3 R5). Por lo tanto, es demasiado pronto para una comparación con los Súper 2000", dijo un Bouffier que no sabrá que sera de el al acabar la cita del europeo.
Fuente: rallye-magazin.de